4to. Encuentro Ancestral en Phoenix Arizona.

El discurso de los Consejos de Ancianos en los pueblos precolombinos conocidos también como Huehuetlatolli, en el lenguaje Nahua. La sabiduría de origen precolombino, practicada por los sacerdotes en su mayoría ancianos llamados Tlamatinimes [los que saben algo], fue heredada por los Toltecas. El pueblo tenochca o mexica, sucedáneos de la cultura Tolteca, madre de las tradiciones de los pueblos originarios de México; fueron los iniciadores del calendario y cosmovisión azteca. Cuyos conocimientos fueron practicados por el sacerdocio Azteca, hombres llamados Tlamatinimes. Encargados de guiar al pueblo, así como el destino del hombre sobre la tierra y el sentido de este. Esos hombres sabios, empeñados en esclarecer los movimientos de los astros, la marcha del tiempo y el enigma de la divinidad; versaban todos sus conocimiento en códices, textos grafo-lingüísticos que explican e interpretan el proceso evolutivo cultural del México antiguo. Es por estos textos grafo-lingüísticos, que nuestros ancestros transmitían las enseñanzas milenarias de nuestra cultura, y que se practicaban en la unión de Consejos de Ancianos Sabios. Que contribuyeron en el rito de paso, desde el embarazo hacía la niñez y de esta a la adolescencia, así como de la adultez a la ancianidad. Rito que se practicaba en diferentes escuelas, por ejemplo los Calmecac [escuela de la nobleza] y Calpulli [escuela del pueblo]. Escuelas dedicadas a la invitación reflexiva y meditativa, para encontrar la verdad del universo. Verdad entendida como el equilibrio simbiótico entre hombre y naturaleza. Vida reflexiva realizada por los aprendices y los maestros de estos. Vida en que la creencia primordial era de disfrutar la existencia finita del hombre, pues esta era una ventura. Dicha inseparable de la vida, así como de la muerte. Que inicia desde el embarazo; rito asimilado entre la vida y la muerte por parte de la mujer y la partera, así como la de los guerreros muertos en combate. La función de los consejos de ancianos en la organización social Azteca Como se había mencionada anteriormente los Tlamatinime, se encargaban de guiar, y preparar al pueblo y la nobleza de las adversidades de la vida, así como la posibilidad del disfrute de esta en la finitud de la existencia del hombre. Sin embargo, también tenían un papel destacado en la organización social. Por ejemplo en los Calpullis, el Consejo de Ancianos tenían el deber ancestral de guiar la función de cada integrante de los Calpullis, así como de los Calmecacs. Calpulli o Calmecac, entendido como la “familia” tradicional azteca, la primera de origen popular y la segunda de raíces nobles. Diferenciándose de la familia judeocristiana, pues si bien la familia judeocristiana tiene algunas similitudes con las antes mencionadas. Estas no hacen justicia a lo que verdaderamente se refieren como actos organizativos. Ya que en el Calpulli, así como el Calmecac, el hombre no es el centro de su organización, ni la mujer se subordina al hombre. Como lo que sucede en la familia contemporánea judeocristiana, en la que el hombre es el sentido de la unión de la norma familiar, y la mujer es la que se subordina a esas normas. Es por ello que en el Calpulli y el Calmecac, el equilibrio entre cada integrante es necesario para continuar con el orden destinado por la naturaleza, seres vivos más viejos que la propia existencia del ser humano, y por consecuencia las jerarquías de este eran a partir de sus conocimientos; saberes ancestrales captados a través de los años de vida de los ancianos, acumulando experiencias meditativas a través de la contemplación del entorno natural. Los viejos, aprendiendo de los más viejos, osea de la naturaleza. Y es por ello que los ancianos eran los elegidos para regir y guiar todo Calpulli y Calmecac. Y que con sus consejos guiaban a los integrantes de todo Calpulli y Calmecac. Mujer, hombre e hijos participaban con su atención, aprendiendo de los consejos de los más viejos y los más sabios del pueblo Tenochca. A pesar del tiempo estas prácticas aún siguen vivas, muy común en las zonas indígenas, cuya forma organizacional rigen el modus de vida cotidiano con la naturaleza, así como políticas y sociales, como las rescatadas por las comunidades zapatistas entre las más notorias de nuestra época. Para finalizar el Consejo de una mujer anciana, hacía la mujer jovial. . El que corre mucho poco avanza . Ama mucho a tus hijos mas que tu marido, porque el hombre no es tuyo y mañana es de otra. Pero tus hijos siempre serán tuyos, A donde el corazón se inclina el pie camina . Saludos y abrazos a todas .